Eso. Si no vas eres un imbécil. Si no vas no tienes sentimientos. Si no vas deberías agarrar todos esos discos color fluor que compraste de pura moda, molerlos, mezclarlos con leche y comértelos a la hora del desayuno para que mueras con esa música caca en la que invertiste por creer que lo bueno sólo está en lo anglo, en lo ondero, en su foto con la cervecita subida a Instagram con esa banda de fondo.

Si no conoces a Los Planetas no es tu culpa. Es culpa del medio. Es culpa de meterte la misma música de siempre a la fuerza. Es culpa de bandas que descubrieron a los Strokes, sin desmerecer a los neoyorkinos, y se quedaron pegados ahí para siempre. Debes ir a Los Planetas por eso. Para que digas de una vez por todas que hay música más allá de la de la radio, del blog que te habla de bandas (como este) y de la canción de moda gracias a un comercial o una teleserie.

Los Planetas son sentimiento. Son una regalo desde Granada para todo el hispanoparlante. Es volver a nacer y morir al mismo tiempo. Todo por culpa de esas cosas llamadas sentimientos. Te tocan la medula, el pecho, el culo, te tirita la pera, se te inflaman los ojos, ríes como un imbécil y gritas de rabia. Son la melancolía de no tener los cojones de sacar a bailar a la chica que te gusta, o de simplemente de no tener el valor de hablarle. Los Planetas son una banda para todos los que han sufrido, sufrirán y seguirán sufriendo. Es decir que estos españoles son para todos. Y están en tu idioma.

Escucharlos es un viaje al espacio, al centro de la tierra, a las calles de cualquier ciudad donde la gente va a misa los domingos. Por algo son parte del imaginario de muchos cabros que prácticamente agotaron las preventas para esta, su primera vez tocando en Chile. Ellos son lo mejor que tiene España para ofrecer al resto del mundo. Son una de las primeras evidencias, muy literal evidencia, de que lo independiente puede surgir entre un mundo lleno de rockeros transformados en maniquíes. También, porque no, son la evidencia de que lo que consideramos independiente puede vender. Y así mismo las grandes disqueras, a comienzos de los noventas, confiaron en su sonido y podemos ver la gran gama de bandas que han salido de la península ibérica. Desde ese momento hasta ahora.

En fin: son pop, son rock, son shoegaze, son todo lo que siempre has querido ser. Una gran inspiración para un sin de bandas en nuestras latitudes.

Todavía estas a tiempo para empezar una bonita historia de amor. Nunca es tarde. Muchos ya estamos enamorados. Pero no lo mostramos tanto porque somos egoístas. Quiérete un poco y anda a verlos, por el bien de la humanidad, de tus oídos y por el futuro de la lengua española.

CONCURSO:
Ah, oye… regalamos una entrada doble para el primero que nos mande una carta de amor a Los Planetas. Es bien fácil (o todo lo contrario). Aplícate en Word, pon todo tu corazón, copias y la pegas acá abajo en forma de comentario. No olvides dejar tu nombre completo y mail para contactarte.

GANADOR:
«Corría el año 2005, y a la distancia le escribía cartas a mi actual esposa, en ese entonces éramos solo amigos virtuales, con la inspiración del grupo, me hacia de letras en forma de poemas que luego de grabar en CD adjuntaba sus canciones, en mis cartas, escritas a manos, que por suerte ella iba contestando durante 2 años, mientras estábamos lejos el uno del otro, y cada vez que escuchaba una canción, me imaginaba que ella también lo hacia, hoy la maldita situación económica nos impide ir a ver a la banda que, de la mano de sus canciones, nos dio una mano a nosotros como pareja. Pero si no pasa nada, igual la seguiremos escuchando y de seguro con el éxito que tendrán vendrán otra vez, y así espero tener las lucas.»
-Esteban Garrido Del Sol
Y esta es la carta de amor que se lleva la entrada doble. Esteban ya fue contactado.

Los amigos de Celadores (los que los traen, aplausos) nos avisan que sólo quedan entradas de $25.000 pesos. Las cuales puedes adquirir acá.