Un mozalbete disfrazado de lobo y con un tenedor en la mano persigue a su perro por las escaleras. Cuando lo atrapa, lo zamarrea y le grita como si se lo fuera a comer. El perro no entiende ”“obviamente- que ocurre y la imagen se congela: Where The Wild Things Are (Donde Viven Los Monstruos). Así empieza la nueva de Spike Jonze: una película para todas las edades, pero con disfraz de cine infantil. Una historia de traumas sublimados en fábulas que no quiere que pongas los pies sobre la tierra.

Por Ignacio Molina

En Donde Viven Los Monstruos (2009) vas en una barcaza, pero Spike Jonze no te pasa el timón ni el ancla ni, mucho menos, el salvavidas. Jonze te va a hacer naufragar en una isla ””literalmente”” de monstruos (quizás tus propios monstruos) con crisis de identidad y quiere que te pierdas para que así te encuentres con el chico outsider que ””tal vez”” fuiste anteriormente. Ese que se divertía con las historias que surgía en su imaginación, ya que no tenía hermanos, ni vecinos. Y quizás tampoco amigos. O ese que, años después, prefería quedarse el viernes por la noche encerrado en su mundo de películas, comics o videojuegos en vez de ir a las fiestas de su colegio.

Bueno, tal vez tu infancia estuvo lejos de ser tan solitaria como la de Max (Max Records), el protagonista, sin embargo, en Where The Wild Things Are, durante 100 minutos, vas a vivir en carne propia lo que se siente ser un outsider. Y esta no es la historia del nerd al que le hacen bullying clase tras clase y recreo tras recreo. Tampoco es una historia ambientada en pasillos con largas filas de casilleros y porristas en bailes de graduación junto a mariscales de campo. Esta no es una película de Jason Biggs, Michael Cera o Christopher Mintz-Plasse. Esto no es el cliché gringo del cine nerd. De hecho, acá no hay nerds. Hay outsiders. Más bien: monstruos outsiders. Algo asi como en The Social Network, pero más crudo y completamente offline. Es decir: esto se trata, como teorizaba Paul Watzlawick, en Palo Alto, de desconfirmación. De negarle la existencia al otro. De decirle, sin decírselo, “tú no existes”.

Michel Gondry (Eterno Resplandor; 2004) mataría por hacer una película así. Pero tal vez por temas de ego, extravagancia y un gran dejo de siutiquería, últimamente ha perdido el timón despachándose melodramas (La Ciencia del Sueño; 2006) llenos de personajes patéticos. En cambio, Jonze ha jugado con la mismas temáticas de Gondry ””la infancia, los sueños, las frustraciones”” pero manipulándolas con el talento del titiritero de ¿Quieres ser John Malkovich? (1999).

Es la mano de Spike: el toque que le da maestría a los proyectos en los que se mete (Heavy Metal in Baghdad, 2007; Synecdoche, New York, 2008). Una talento que viene curtiendo desde que trabajó como director de clips con Sonic Youth (100%, junto a Kim Gordon) y que plasmó en pantalla grande en filmes como ¿Quieres ser John Malkovich? y El ladrón de Orquídeas (2002). Aunque siendo sensato, en Donde Viven Los Monstruos no todo el crédito es para el gran Spike: el que realmente hace de Where The Wild Things Are una película imperdible es Max Records (The Brothers Bloom; 2008), el mozalbete que vive las de Quico y Caco al ritmo de la música de Karen O: vocalista de Yeah Yeah Yeahs que compusó toda la banda sonora.

Volviendo a lo central: tal como en el cine de Gondry, en Donde Viven
Los Monstruos también está el chico herido y sufrido y rechazado. Pero una de las gracias es que este chico todavía no ha crecido. No se ha transformado en un Peter Pan. No se trata de un tipo patético como Gael García en La Ciencia del Sueño, el que la única forma que tenía para relacionarse con las mujeres ””por ejemplo”” era sorprenderlas mediante cajitas hechas con papel couché o celofán. No. Acá el protagonista sufre el rechazo y lo mastica en el momento. Acá el niño todavía es niño y el tiempo todavia no dá una lectura para comprenderlo. Y esta es la gracia: acá todavía no se asume una postura ante la vida. Ya que la vida recién se está configurando, recién se está armando.

Y uno, entonces, no sabe hacia donde diablos lo va a llevar el barco.

Ficha:

DIRECTOR: Spike Jonze
GÉNERO: Aventura – Drama – Familia
AÑO: 2009
PAÍS: USA
DURACIÓN: 101 minutos
CALIFICACIÓN: Todo espectador.

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Trailer 2:

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Trailer 1:

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*Los monstruos viven acá y acá.