
Hoy, 21 de Enero, se estrena Enseñanza de Vida (”’An Education”’), ganadora del Premio de la Audiencia en el pasado Festival de Sundance, dirigida por Lone Scherfig (Italiano Para Principiantes) y con un guión adaptado por Nick Hornby: el autor de Alta Fidelidad. En ella conocemos las aventuras y desventuras, durante la transición de niña a barely legal, de Jenny: una atractiva jovencita inglesa interpretada por Carey Mulligan: la nueva talentosa e inocente lolita que el cine actual necesitaba.
Por I. Molina
Jenny (Carey Mulligan) es una atractiva y virginal lolita de 16 años que destaca en todo los aspectos fundamentales de esa simpática etapa de la vida: es apetecida sexualmente por los compañeros de su escuela, tiene talento para los instrumentos musicales, las mejores notas en su grado y las cosas bastantes claras para el futuro: ir a Oxford a estudiar Literatura. Además, es extremadamente sencilla y anda por la vida sin creerse el cuento ni sacar partido de sus gracias. Es decir, Jenny es la mejor pareja que puedes tener cuando todavía no sales del colegio. Aunque, también, puede ser la mejor que puedes tener 15 años después de colgar el uniforme:
Sucede que Jenny es objeto de caza para todo tipo de especímenes y por donde pasa, esparce deseo. Y sin quererlo. Así las cosas, una tarde luego de clases, mientras va camino a casa bajo tremenda lluvia, en Twickenham, Londres, 1961, conoce a David (Peter Sarsgaard), un ilustrado y amable jotecillo que la dobla en edad y que se ofrece para’ ir a dejarla, para que no se moje, en su Bristol 405: el mejor auto de la época. La chicuela no mira con buenos ojos la propuesta, pero tampoco hace mucho por rechazarla: ella es coquetería innata. Finalmente David’ consigue subirla al bote. Para sorpresa””o tal vez no””en el viaje se porta bien con la chicoca: no le insinúa nada ni trata de tocarle alguna presa. Simplemente está estudiándola. Olfateándola. Conociéndola.
Luego, como Casanova de vieja escuela, le envía flores a la casa, la espera a la salida del colegio, se gana la confianza””sin mucho esfuerzo””de sus padres y la invita a cenar. Y así avanza hasta forjar una relación: llevándola a conciertos, galerías y restoranes de moda. [SPOILER] Incluso logra convencer a los vejetes para que lo dejen invitarla un fin de semana a Francia. De esta manera el ‘ treintañero va mostrándole el mundo beat de literatura, pinturas y películas con el que Jenny siempre alucinó. Y siempre tratándola con cautela: sin siquiera rozarle una tetita o pedirle una francesa. Con todos esos elementos Jenny comienza a soñar y se cuestiona si realmente quiere ir a estudiar a Oxford o quedarse para siempre con David, con quien, aparentemente, tiene la vida y la felicidad asegurada. [FIN del SPOILER]
An Education (2009), dirigida por Lone Scherfig (Italiano para principiantes) es, básicamente, una historia sobre una jovencita transformándose en mujer. Una lolita enfrentándose a la disyuntiva en boga de las inglesas de principios de los 60”’s: estudiar una carrera acorde a sus intereses, o casarse con el primer campeón que la trastorne y pueda asegurarle un futuro de margaritas. Es, también, una película sobre los sueños de una familia modesta (Alfred Molina, Cara Seymour) que tiene puestas todas las fuerzas y esperanzas en el futuro de su hija. Un matrimonio que debido a la degradación en su relación por factores externos””vivir en un país en pleno período de reconstrucción””ha perdido la sabrosura de la vida en pareja, siendo los días simplemente un cumulo de gotas de sudor que nunca logran cuajar en satisfacciones palpables.
Una película sobre los caminos de la vida. De atajos y metas. De salirse de la ruta y encontrarse con sí-mismo luego de sendas tendaladas. Una película sobre el aprendizaje, sobre la enseñanza. Pero no la formal, sino que la otra: a que se aprende en la escuela de la calle. La que se aprende tras caerse y levantarse manteniendo los mismos sueños antes del costalazo. Y lo mejor es que todos es presentado de manera clásica: sin trucos o artimañas de edición cinematográfica, sin filtros que tratan de forzar la sensación de una época determinada y sin soundtracks cargados de hits de moda. Una película sostenida desde un guión sencillo que es defendido mediante tremendas actuaciones, en las que, además, vivenciamos el nacimiento de una nueva estrella: Carey Mulligan, la talentosa e inocente lolita que el cine actual necesitaba.
Ficha:
DIRECTOR: Lone Scherfig.
REPARTO: Peter Sarsgaard, Carey Mulligan, Alfred Molina, Emma Thompson, Sally Hawkins.
GÉNERO: Drama
AÑO: 2009
PAÃS: UK
DURACIÓN: 95 minutos
CALIFICACIÓN: +13

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Trailer:
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Publicado por Ignacio Molina
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