La revista icono de los 90 se acabó el 2003, cuando pasó a ser «una red de blogs» (como decía su publicidad callejera) alojada en Zona.cl. El viernes pasado El Mercurio decidió dejar stand by el sitio, despidiendo al editor y a la coordinadora periodística. La Zona, como la conocemos, ha muerto.

Nuestros amigos de Paniko han hecho un excelente trabajo publicando columnas de gente que pasó por ahí. Desde Juan Pablo Meneses, que estuvo en los primeros tiempos, el mítico Sergio Paz, Gonzalo Maza quien fue su último editor como suplemento, y Maria Paz Cuevas (o Pepa Valenzuela), quien dictaba el taller de columnistas que se hizo en la era Wiken.

Nosotros tenemos miles de recuerdos de la Zona de Contacto. Disorder es un medio de comunicación hijo de esas 8 paginas de papel de diario, y yo comencé a ser parte de la Zona cuando estaba en las últimas hojas del Wiken, una especie de sueño profesional cumplido que no me dejó dormir la noche antes de ir por primera vez al diario.

La Zona fue una escuela para mi y para muchas personas que admiramos, sobretodo en el ámbito del cine, los guiones y el periodismo. La Zona era más que El Mercurio y mucho más que todos los que pasamos por ahí, la Zona era una escuela rara, medio facha y lejana, pero era competitiva y sin duda conocí amigos que tendré toda la vida.

La odien o la quieran, la Zona de Contacto ha muerto y acá estamos sus vástagos, tratando de crear un gran árbol. Al menos ya tenemos las raíces.