Por I. Molina
Domingo, 4:52 AM. En el paradero de Manquehue con Vitacura hace más de una hora que no asoma micro alguna. Somos unos siete esperando locomoción colectiva. Todos entre 20 y 30 años. La mayoría viene de Las Urracas. Otros de La Previa. Pasan y pasan taxis. Todos llenos. A lo lejos se escucha el graznido de un queltehue o un chonchón o uno de esos pájaros que emiten algo así como un «tue-tue» mientras varios Opel Corsa pasan y pasan rajando el pavimento, como haciendo carrera, como sacando un poco de pica cuando tocan la bocina y bajan el vidrio dejando ver a mujeres de buen champú, de buena marca de jeans, de buen futuro.
Si bien esta no es mi comuna y rara vez deambulo por acá, hoy tengo una misión: sondear un par de problemas vinculados a la disponibilidad de locomoción en Vitacura. Exagerando un poco: investigar la situación actual del transporte público de esta zona cuando la noche comienza a desvanecerse y las roncolas comienza a saber todas iguales, sean Barceló, Mitjans o Havana. Cuando todas las micros sirven… pero ninguna pasa.
Entonces, cuando el reloj marca las 5:00 AM, un tal Jorge (24) arroja el resto de un Lucky Click y luego da una patada al basurero, haciéndolo girar como a un jugador de taca-taca, y luego me dice ””o le entiendo”” lo siguiente: «Cada vez que vengo a Las Urracas pasa lo mismo… Y, puta, aunque sé que lo más probable es que me voy a demorar más de una hora en esperar que pase una micro, siempre tengo fe en que esta huevá cambie. Y puta, perrito, si acá querís hacerla con una mina, tenís todas las de perder: ninguna te va a esperar tanto y al rato va a llamar a una amiga o al ex pololo o al pololo o al viejo para que la pase a buscar. O venís en auto solo o con varios amigos, o te la jugái por pagar un taxi, o fuiste».
05:14 AM. Finalmente pasa una micro. Nos subimos. Fuimos.
Vodka, Vitara y Vitacura
Vitacura. La comuna más rica del Gran Santiago. Epicentro del carrete zorrón desde los ochenta (Vodka, Vitara y Vitacura). Varadero nocturno de Quenita Larraín, El Negro Piñera, Alexis Sánchez, El Huaso Isla, Longton o cualquier personaje digno de una imitación de Kramer. Una comuna que, esperanzada, actualmente cuenta con un candidato que plantea jugársela por una «Vitacura en Buena«: Jorge Echevarría, empresario nocturno dueño de Las Urracas que va como independiente por un cupo del PPD. Un ingeniero comercial que estudió en Bélgica, fue gerente de la papelera CMPC, EFE y además hizo clases en la Universidad de Chile. Un tipo de mundo que en administración parece venir de vuelta. Me contacto con su asesora de campaña y lo llamo un miércoles por la noche y le cuento lo sucedido y le pregunto cuáles son las medidas que, de ser elegido concejal, tomaría al respecto.
Al otro lado de la línea, Echevarría responde: «Entiendo lo que me cuentas. Mira… en Vitacura existen los recursos suficientes como para llevar a cabo la creación de un transporte público gratuito y seguro para que los habitantes de la comuna puedan volver a sus casas en la noche o que las personas de otras comunas puedan conectarse con transporte que los lleve a sus comunas de residencia. Esta es una de mis principales propuestas como candidato a concejal por Vitacura. Y, dada la situación actual de la comuna, la encuentro completamente viable».
””¿Transporte gratuito?
«Claro, me refiero a buses subsidiados por la comuna que funcionen como una suerte de alimentadores de los buses dispuestos por el Transantiago. Se trataría de una empresa paralela al Transantiago, financiada por la municipalidad y con el fin de resolver los conflictos de locomoción que actualmente tienen tanto como los habitantes de Vitacura como los de otras comunas que vienen a carretear y trabajar acá».
””Al respecto: ¿Qué le parece la idea de una Vitacura con leyes más permisivas para la vida nocturna? Por ejemplo que en Vitacura los locales no tengan que cerrar a las 5:00 AM, que puedan seguir funcionando de corrido, de forma interrumpida.
«De ser elegido, no me interesa que nos traten de forma distinta a otras comunas. Lo principal es velar por la seguridad en los sectores de alta fluencia de público. Sobre todo los fines de semana. Entre otras soluciones considero fundamental crear un servicio de valet parking y estacionamientos subterráneos o estacionamientos que ocupen espacios municipales para así evitar problemas con los vecinos. Y también se trata de fomentar el carrete responsable, el que no perturba la vida en comunidad. Esto ya sea para los dueños de los locales como para los que los asisten a los locales. Principalmente, de trabajar en comunidad. Un todo unido. Y también, por supuesto, abogar por el trabajo de los jóvenes que en Vitacura encuentran un espacio laboral…. Y, claro, resolver el problema del transporte público. Ahora: esto no se trata de ser más permisivos con el carrete, sino de proteger a los habitantes y hacer que la vida nocturna sea más confortable y segura, desde el comienzo al termino».
No existen antecedentes que liguen a Echevarría con la política. Señala que es su primera vez. Ante el rumor que postula que El Negro Piñera es su jefe de campaña, responde: «Con El Negro somos buenos amigos. Nos conocemos hace años. Si bien él ha sido la cara visible de mi campaña, no puedes encargarle al Negro un trabajo como ése. Él me ha acompañado en el proceso, es un hecho, incluso ha salido en algunos canales hablando de la campaña. Es un gran amigo. Igual que la Kena o Longton que también estuvieron para el lanzamiento de mi candidatura en Las Urracas».
El Urracazo
Este año, una noche de junio, Gary Medel y Eduardo Vargas se escaparon de una concentración en Juan Pinto Durán, en pleno proceso de Clasificación Brasil 2014, para relajarse y compartir un buen rato en Las Urracas. Situación que la prensa nacional, al sorprenderlos abandonado la discoteque a las 04:00 AM, condenó y denominó como «El Urracazo». Echevarría recuerda el hecho y señala: «Pese a todo lo que sale en la prensa, Medel y Vargas son buenos tipos. Recuerdo que estaban en sus días libres ””incluso uno de ellos estaba lesionado”” y si bien se escaparon de la concentración, acá se portaron de lo más bien. De hecho siempre lo hacen cuando vienen a La Urracas. Vienen a compartir en buena onda, a conversar un rato con los amigos, a divertirse. Dentro de los límites, claro».
””Harto futbolista en Las Urracas
«Sí… generalmente los futbolistas que vienen juegan casi todos en Europa, como Medel, Vidal, Sánchez. Vienen en sus ratos libres cuando están en Chile».
””¿Cuál es el más bueno para carretear? ¿Para bailar?
«Ninguno de ellos es muy bueno para bailar. En realidad bailando no lo hacen muy bien. Y para carretear… no sé, por ejemplo Sánchez no toma nada cuando viene. Sánchez no toma alcohol».
””¿Y qué hay con Johnny Herrera?
«A Johnny no lo veo desde hace como un año en Las Urracas».
””¿Es tan pesado como cuando aparece en televisión, en las conferencias de prensa?
«Es que acá somos todos de la U. Entonces el Johnny es nuestro ídolo. Nos llevamos excelente con él. Por lo demás, Jaime Véliz ””que trabaja conmigo”” es colocolino y cuando Johnny ha venido los dos han compartido como buenos amigos».
Seguimos conversando con Echevarría temas vinculados a la vida nocturna y temas vinculados a su propuesta como concejal. Una que, con toda franqueza, se plantea derechamente orientada a la seguridad y confortabilidad de un carrete en «buena onda». Eso sí: sin dejar de lado necesidades fundamentales de cualquier comuna. Cuando son más de las 22:00 al otro lado de la línea Echevarría se despide. Tiene que ir a trabajar: comienza el carrete en Vitacura. A las 5:00 AM en el paradero de Manquehue con Vitacura un tal Jorge, un tal Martín o un tal Nicolás repetirá como un mantra: «ya vendrá una micro, ya vendrá una micro». Como todas las noches. Como siempre. Mientras, el 90% de los habitantes de la comuna dormirá en paz. Sin mayores preocupaciones. Vitacura: la comuna más rica de Chile.
Publicado por Ignacio Molina
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